EL FUNCIONAMIENTO DE LA MENTE

Imagen de Osho.

Vivir en el Aquí y el Ahora

La mente siempre está en el pasado o en el futuro. No puede estar en el presente, es absolutamente imposible para la mente estar el presente.
Cuando estás en el presente, la mente ya no está ahí, porque mente equivale a pensar. ¿Cómo puedes pensar en el presente?

Puedes pensar en el pasado; ya se ha convertido en parte de la memoria y la mente puede trabajar con ello.

Puedes pensar en el futuro; todavía no está aquí y la mente puede soñar con ello.

La mente puede hacer dos cosas: puede moverse hacia el pasado, donde hay espacio de sobra para moverse, el vasto espacio del pasado, en el que puedes seguir y seguir penetrando; o puede moverse hacia el futuro, donde también hay un espacio infinito, en el que puedes imaginar y soñar sin límites.

Pero ¿cómo va a funcionar la mente en el presente? En el presente no hay espacio para que la mente haga ningún movimiento.

El presente es solo una línea divisoria, nada más. Separa el pasado del futuro, no es más que una línea divisoria.

Puedes estar en el presente, pero no puedes pensar en él; para pensar se necesita espacio. Los pensamientos necesitan espacio, son como los objetos. Recuérdalo: los pensamientos son cosas materiales, muy sutiles, pero son materiales.
No puedes pensar en el presente. En el instante en que empiezas a pensar, ya es pasado. Ves salir el sol y dices: «Qué bello amanecer.»
Cuando lo dices ya es el pasado. Cuando el sol está saliendo no hay espacio suficiente ni siquiera, para decir «Qué bonito», porque cuando pronuncias esas dos palabras, «qué bonito», la experiencia ya se ha
convertido en pasado.

La mente ya lo ha archivado en la memoria; Pero en el momento exacto en que sale el sol, el momento exacto en que el sol aparece sobre la línea, ¿cómo puedes pensar? ¿Qué puedes pensar? Puedes estar con el sol que sale, pero no puedes pensar.

Hay espacio suficiente para ti, pero no para los pensamientos.
Ves una hermosa flor en el jardín y dices: «Qué bonita rosa.» En ese momento ya no estás con la rosa; es ya un recuerdo.

Cuando la flor está ahí y tú estás ahí, los dos presentes ante el otro, ¿cómo podrías pensar? ¿Qué podrías pensar? ¿Cómo va a ser posible el pensamiento? No hay espacio para él.

El espacio es tan estrecho -de hecho, no hay nada de espacio- que tú y la flor no podéis ni siquiera existir como dos seres, porque no hay espacio suficiente para dos; solo puede existir uno.

Por eso, en una presencia profunda, tú eres la flor y la flor se convierte en ti. Cuando no hay pensamiento, ¿quién es la flor y quién es el observador?

El observador se convierte en observado. De pronto, desaparecen las fronteras. De pronto, te encuentras con que has penetrado en la flor y la flor ha penetrado en ti. De pronto: ya no sois dos; solo existe uno.

Si empiezas a pensar, os convertís de nuevo en dos. Si no piensas, ¿dónde está la dualidad? Cuando existes con la flor, sin pensar, es un diálogo. No un duólogo, sino un diálogo …..

Autor: Osho

Fuente: Conciencia

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